martes, 5 de abril de 2011

Perfeccionando lo imperfecto

¿Sabes esa sensación cuando mantienes contacto por primera vez con una persona y desde ese mismo instante sientes que hay algo especial?

Te das cuenta desde el primer momento que él tiene eso que tú andas buscando, lo que nunca pensaste que llegarías a encontrar.

Da igual lo que digan los demás, no puedes dejar de pensar en él, en la suerte que tienes por conocerle.

No importa que él esté tras de otra, que tenga mil pájaros en la cabeza y no se dé cuenta de lo importante que es para ti. Sólo el hecho de existir puede perdonarle su despiste.

Podría pasarme toda una vida hablando de lo perfectos que son sus defectos y me faltaría tiempo. Si al menos le conociese un poco más...

Hay tantas cosas que me gustaría decirle y no me atrevo...

Quiero saber todo de él; sus manías, sus gestos... Quizá sea ahí cuando descubra que no es tan perfecto como parecía, que sólo es uno más del montón, que con tan solo dos palabras fue capaz de ocupar todo mi pensamiento.

A pesar de todo, no, no estoy enamorada...

1 comentario:

Aurora dijo...

Me encanta estas palabras! me siento identificada con lo que dices ajajaj; me gusta mucho tu blog! un saludo