jueves, 27 de enero de 2011

Mi jacinto comienza a florecer

Es uno de esos días en los que no me apetece hablar con nadie. Solo tengo ganas de echarme a llorar, de olvidar todo. Las cosas no han salido como esperaba, de hecho, últimamente no sale nada como yo pretendía que saliese. Pero, ¿alguna vez fue eso posible? Yo qué sé.

Bien, acabo de mirarme la rodilla y me he encontrado con rasguños que ya ni siquiera recuerdo con qué me hice. Estoy desorientada, ya ni pienso en mí misma. Agacho la cabeza y continúo mi camino.

Sigo viéndole y me duele. ¿Acaso va a parar esto alguna vez? No aguanto ni un segundo más esos sentimientos que quiero detener y que no soy capaz. Ya ni odio ni amor. Solo me queda la indiferencia y el recuerdo de que una vez estuvo ahí. Quiero sustituirle, pensar en otras cosas...

También me siento un poco abandonada en esta habitación. Ya no recibo visitas inesperadas, bueno, tampoco me gustaría tenerlas. Ya hace algún tiempo que me dedico a poner la cara que no me apetece enseñar. No quiero hablar ni decir lo más mínimo que se me pasa por la mente en ese momento para recibir oídos sordos. Yo también tengo problemas y no siempre querría escuchar los vuestros. La coraza aumenta poco a poco. Llegará el día en que no pueda quitarla y entonces seré como un maniquí. Nada saldrá de mi boca y tampoco perderé el tiempo oyendo vuestras bobadas.

Sigo liberando endorfinas aunque ahora no me sirve de nada. ¿Dónde está mi felicidad? Me canso de recibir patadas y más aún de buscar en vano. Pensaba haberla encontrado pero ya he visto que era solo una pequeña ilusión, algo que salió de mi imaginación y que, en verdad, nunca estuvo ahí.

Y lo peor de todo es que empiezo a jugar con algo más importante, con mi salud. No sé cuidar de mí misma y ya van surgiendo los primeros síntomas. ¿Me va a prohibir el médico estudiar? ¿Salir a la calle para no ver a nadie? ¿Va a obligarme a tener una sonrisa permanente? Estoy agotada para hacerle caso. Jamás pensé que llegaría este extremo.

Y las lágrimas comienzan a caer. No hay un motivo aparente, es la gota que colmó el vaso. "Son las hormonas", llevo diciéndome toda la tarde. Hacía bastante tiempo que no pasaba por esto. Me falta la película triste. La sustituyó el libro. Lo acabé y el final me ha dejado peor de lo que estaba. Me ha parecido fascinante, nunca imaginé que acabaría así.

He logrado desahogarme un poco. Mañana será otro día con nuevas aventuras y nuevos riesgos que correr. Confío en que llegue alguien y sepa sacarme la sonrisa, sin tener que forzarla. Estoy segura de que lo hará.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Si quieres tener fuerzas para seguir adelante tienes que sacarlas de ti misma. ¡Quiérete más! Esta bien lamentarse de sí mismo durante algún tiempo ya que ayuda a sacar todo eso que tienes dentro. Pero después de haberte desahogado hay que mentalizarse y decirte que tienes que salir para adelante. No merece la pena seguir llorando por algo que no tienes, sino disfrutar de lo que sí tienes. Porque más adelante te darás cuenta de que desaprovechaste muchas oportunidades porque preferiste seguir llorando a secarte los ojos y mirar más allá. Hay cosas muy importantes, que aunque ahora no las valores, se van y no regresan jamás.

Anónimo dijo...

No te desanimes. Una vez me enseñaron que las cosas suceden como tú quieres que sucedan. Sonríe que no cuesta nada, aunque no tengas ganas.

La que mató al gato dijo...

Yo no opino igual, si no tienes ganas de sonreír no lo hagas, porque no tienes que aprender a sonreír si no quieres, sino que aprendas a no olvidar lo que es sonreír. Sé que esta entrada no es lo mismo, posiblemente, a lo que te pasa, ya que no sé que edad tienes, pero a lo mejor te puede servir de algo:
http://hidingsecretstoeveryone.blogspot.com/2009/04/momento-mierda-la-realidad-cotidiana.html

Dani dijo...

detras de la esquina esta esa persona que puede sacarte la sonrisa sin forzar-la, esa que se te queda la cara de pasmado cuando lo miras, solo confia en que el destino se ponga de tu parte, solo piensa que si el destino te ha puesto mala cara, ahora ya solo le queda ponerte la buena, por lo tanto no te extrañes si mañaana ves que el sol sale con mas fuerza y que el dia nace solo para ti!!